lunes, enero 21, 2008

A QUE HUELEN LAS COSAS QUE NO HUELEN??


No me direis que el susodicho anuncio de compresas no tenia miga.....en su día yo asocie este anuncio a una especie de alegoría, jugando con un doble sentido que yo no acababa de entender, comparaba la menstruación femenina con el celo animal. Parece una burrada, pero pensar por un instante si alguno habéis notado en alguna ocasión cierto tufillo en vuestra novia, hermana o amiga que os impulsara irremediablemente a practicar sexo con ella? (Espero que no, por que si alguno dice que si…que se lo haga mirar)

Bien, pues a mi perro si le ocurre. Cuando mi perra esta en celo, el pobre animal no come, no duerme, no vive. Una lastimica me da.

La otra opción y la más posible, es que la mujeres tengan el sentido del olfato infinitamente mucho mas desarrollado que los hombres y si que puedan oler….ejem…bueno….su cosita. Teoría esta con grandes fundamentos que se pueden apreciar si por ejemplo nos centramos en ciertos aspectos cotidianos de la vida.

Para mí, y creo que para el genero masculino en general es un autentico dilema identificar la ropa sucia. Cuando eres pequeño es bastante sencillo saber cuando tienes que cambiarte por tres razones fundamentales. A saber. Primero, básicamente te tienes que cambiar todos los dias. Si me apuras habrá quien varias veces en el mismo dia. Segundo, las manchas son fácilmente identificables, grandes…..y oscuras. Y tercero, y más importante, no es cosa tuya, de eso se encarga tu madre.

Luego ya empiezas a vestirte solo y un día te levantas, te vistes y vas a la cocina a desayunar. Entonces tu madre te suelta – Hijo mío, cámbiate de camiseta que esa jumeca que no veas – Que dices, pero como coño es capaz de detectar a 5 metros un olor que he no he percibido pasando, literalmente, por delante de mis narices. Te sorprende, pero a la vez te tranquiliza saber que nunca morirás en un escape de gas o incendio mientras tengas el detector en casa. – Cariño, no hueles a gas -

Pero la verdadera prueba de fuego viene cuando te marchas de casa. Hay es cuando surge la gran duda, ¿esta camiseta esta sucia o limpia?. Por que otras prendas es sencillo, por ejemplo los calzoncillos. Cuando no tengas ninguna duda de que lo amarillo va delante y lo marrón va detrás, cámbiatelos. En primer lugar vas hacia el montón de las camisetas (Yo soy muy ordenado, el montón de camisetas, el montón de los calzoncillos, el montón de los pantalones…), coges una, te concentras…..cierras los ojos y tratas de anular todos tus sentidos centrando toda tu atención en las terminaciones nerviosas de la nariz. Esto es difícil, por lo menos para mí que estoy bastante descoordinado, no se cucar el ojo izquierdo por ejemplo. Bueno, pues coges la camiseta y te llevas la parte de la sobaca a la nariz, directamente. Aspiras profundamente, que aquí es cuando notas el saborcillo salado, que esto pasa cuando el olor es muy intenso y pasa de la nariz a la boca, y te empiezan a llorar los ojos. Pues se han dado casos que con dos cojones, aun con la sensación de haber chupado un pie y con lágrimas en los ojos, dices – Esta me aguanta otro viaje –

2 comentarios:

rosita dijo...

jajaja buena reflexión para comenzar el año...

JuanRa Diablo dijo...

Jajaja. No lo debería decir, pero me he sentido identificado ;)